El mundo del deporte no solo se mide en resultados y competiciones, también tiene un impacto directo en el medioambiente. Desde la construcción de instalaciones hasta la organización de eventos, cada actividad genera una huella ecológica. De ahí surge el concepto de deporte sostenible, que busca minimizar ese impacto y promover prácticas más responsables.
Por eso, en este artículo de EFADte vamos a explicar qué significa realmente el deporte sostenible, cuáles son sus características principales y por qué es una medida cada vez más necesaria en la gestión deportiva. ¡Sigue leyendo!
Qué es el deporte sostenible
El deporte sostenible es aquel que integra la práctica deportiva con la protección del entorno. Implica organizar actividades físicas y gestionar instalaciones de forma que se reduzca el consumo de recursos, se minimicen los residuos y se promueva una relación más respetuosa entre las personas, el deporte y la naturaleza. No se trata de eliminar competiciones o eventos, sino de adaptarlos para que tengan un equilibrio entre beneficio social, económico y medioambiental.
Por supuesto que cuando practicamos deporte, la mayoría de nosotros tratamos de respetar el medio donde estamos, pero esta práctica va un paso más allá.
Características principales del deporte sostenible
Estas son las principales características del deporte sostenible:
- Gestión eficiente de recursos: implica reducir más consumos de agua, electricidad y combustibles en instalaciones y eventos.
- Diseño responsable de instalaciones: aplicar distintos criterios de eficiencia energética, energías renovables, uso de materiales reciclados o reciclables y buena gestión de residuos.
- Movilidad sostenible: promover el transporte colectivo, compartir coche o usar bicicleta y transporte público para asistir a centros y eventos deportivos.
- Educación y concienciación: los clubes y organizaciones deben transmitir valores de respeto ambiental a deportistas, trabajadores y aficionados.
- Eventos verdes: planificación de competiciones con reducción de plásticos de un solo uso, gestión adecuada de residuos y compensación de emisiones.
Ejemplos y aplicación práctica
Un ejemplo claro de deporte sostenible son los maratones o carreras populares que ya integran puntos de reciclaje, reducción de plásticos y planes de movilidad para asistentes. Otro ejemplo es la construcción de gimnasios o estadios con sistemas de aerotermia, placas solares y sistemas inteligentes de climatización e iluminación, que reducen el gasto y las emisiones. También en deportes al aire libre, como el senderismo o el esquí, cada vez se insiste más en prácticas respetuosas con el entorno natural.
¿Por qué es importante apostar por el deporte sostenible?
Adoptar el deporte sostenible no es solo una cuestión de imagen. Cada vez más instituciones, patrocinadores y usuarios exigen que los clubes, gimnasios y federaciones demuestren su compromiso ambiental. Este enfoque mejora la reputación, reduce costes operativos, cumple con normativas y, sobre todo, contribuye a preservar el entorno donde se practica el deporte. A largo plazo, se convierte enuna inversión que beneficia a toda la sociedad.
En resumen, el deporte sostenible se define como la integración del respeto medioambiental en la práctica y gestión deportiva. En el caso de que quieras especializarte en este ámbito, te recomendamos el Curso de Sostenibilidad y Gestión Ambiental en Instalaciones Deportivas de EFAD, donde aprenderás a diseñar, implementar y evaluar estrategias de sostenibilidad aplicadas al deporte. ¡Camina hacia un futuro sostenible y deja tu huella!
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